domingo, 30 de septiembre de 2012

Viaje de ida


Buenas!

Ahora que puedo acceder al blog (y sin embargo mi contacto con Internet siguen siendo preciados momentos que ocurren una vez cada dos días), os contaré cómo fue el trayecto de ida ;).

Viajé con Jorge, un Ingeniero técnico aeronáutico de Madrid.  Muy majo, me ayudó mucho con todo el papeleo del visado y demás. Antes de salir de barajas, fuimos los dos a cambiar euros por yuanes.  El cambio fue un poco robo. pero necesitábamos dinero chino para pagar el hotel a la llegada. Nos atendió coque, el de "La que se avecina" (si no era él, era su hermano xD). Con el dinero en nuestras manos, nos despedimos de nuestras familias y nos subimos al avión. Esta vez, no hubo que correr, ni montar guardia en la puerta de embarque, ni pegarse/insultarse con la gente por los asientos como ocurre con Ryanair, estaban numerados ;).

Nos permitían llevar 23Kg de equipaje en la maleta y 10 en la mochila. Yo llevé 18 y 6,5. Si hacemos cuentas:

(23-18)+(10-6.5) = 8.5Kg que me ahorré de peso a cambio de sonreír como un pimpín sin enterarme de nada cada vez que voy a la tiendas a buscar lo que no me llevé. En fin, aprenderé a espabilarme con el chino.

Volamos con Aeroflot, una aerolínea rusa. La verdad es que me esperaba que fuese todo más cutre, pero al final resultó que aún se lo curraban. Un poco :D.  El itinerario fue el siguiente:

Madrid (23.15) => Moscú (06.00 hora local) [El vuelo duró 5 horas]
Escala 4 horas en Moscú
Moscú (10.00) => Shanghai (23.15 hora local) [El vuelo duró 9 horas]

Es decir, 14 horazas de avión.  Pero bueno, todos los que me conocéis ya os imagináis lo que pasó: dormí. Me despertaba cuando nos traían la comida y después hacía como que era intelectual y leía un poco en el avión, pero me acababa durmiendo de nuevo. Intenté ver la película de imitación china de Tom y Jerry. Nada.

Como anécdota, os contaré que me hice amigo del niño de dos años que se sentaba delante de mí en el primer vuelo. Era rubito, ruso y sonreía mucho.  Nuestra amistad consistió en que yo le saqué la lengua, el me sacó la suya y su padre se sacó la mano del bolsillo y le arreó un guantazo gritando "TRASPRATROFFVIA". Así que me guardé muy mucho de hacerle algo más y desencadenar la ira de la bestia de la madre patria.

En cuanto al aeropuerto de Moscú, como dijo Jorge: "Es un centro comercial enorme, pero en vez de coches en los parkings, hay aviones". Y tiene toda la razón. Nos costó al menos 20 min cruzarnos el aeropuerto de sarapova (así es como decidimos llamarlo), donde vimos azafatas rusas, gente fumando everywhere, chinos durmiendo por el suelo y asiáticos hipsters con sus Galaxy SIII y sus gallumbos de Dulce&Ca Calvin Klein asomando por el pantalón.

El vuelo de Moscú-Shanghai fue ligeramente diferente.  Ahora estábamos rodeados de chinos. Dormí, desayuné, dormí y cené. En los ratos que comía podía a ver a los chinos, todos monos comiendo con tenedores xD. Una de las veces, mi almohada se empezó a mover y la retiré para acabar descubriendo que el chino de detrás estaba moviendo los pies asomados en MIS apoya-brazos al ritmo de su iPod. Al final decidí no pellizcarle, para evitar que todo el avión se pusiera de su parte en plan Richard.

El control de inmigración duró unos 3 minutos, de los cuales 2 de ellos la china de la oficina estuvo desplazando su vista del pasaporte a mi cara, y de mi cara al pasaporte.  Yo sonreía, tratando de poner la cara de sueño de aquella mañana de Junio del 2008 cuando me sacaron la foto del pasaporte. Le dije "soy yo :D" (es español, total el inglés tampoco lo entienden), pero me mandó callar.

Y nada, llegamos al albergue en taxi. Nos intentó cobrar 100 yuanes, y le dijimos que 50. Probablemente costase 25. Una vez allí, dimos la misión por cumplida y nos fuimos a dormir :). Fue un día largo y cansado, pero finalmente habíamos llegado a Shanghai.

sábado, 29 de septiembre de 2012

Libre de censura

Buenas!

Por fin LIBRE. LIBREEE de la censura!!!!



Ya puedo entrar a todas las páginas :D.  He contratado una VPN (la pillamos todos aquí), que por $10 al mes me permite acceder por completo a Internet. La cuestión es que no vale con VPN normales, porque el gobierno chino gasta muchísimo dinero y recursos en bloquearlas, así que al final hay que ir a las de pago.

El problema ahora es Internet.  No tengo Internet en mi piso, y no puedo contratarlo porque me transfieren a Beijing en 2 semanas. Entonces, tengo que venir al curro para acceder a Internet, pero la semana que viene todo esto está cerrado al ser las vacaciones nacionales del país. Así que bueno, ya me lo montaré como sea.

Estoy muy bien, la gente es muy maja, mi habitación es acogedora y vivo con Mr. Wang y Mr. Pai (hombres de 35 años que trabajan en Wison).  Somos muchos internos aquí, así que salimos juntos por las noches.

En cuanto al trabajo... mmññeeein.  De momento no tengo hasta que vaya a Beijing (por las vacaciones), y ayer viernes nos limitamos a dar varios tours por la empresa y sentarnos en el sofa a tomar cafés, uno detrás de otro.  Es IMPRESIONANTE, ya os enseñare fotos.

Y nada más, un abrazo a todos y ahora sí, nos vamos comunicando por el blog!

lunes, 24 de septiembre de 2012

Mi yo nómada


¡Buenas!

Aún no estoy en China (salgo mañana martes, llego pasado miércoles xD) pero ya que tengo el blog abierto, pues vamos a escribir algo, ¿no?

No os voy a aburrir contándoos lo divertido que es preparar la maleta.  Total, siempre me dejo algo y la lista que voy tachando mientras controlo con vista de águila todos los objetos de la cama, acaba demostrando su inutilidad. De lo que me gustaría hablar en este post  es de aquella parte de nosotros  a la que le gusta viajar, nuestra parte aventurera o, como yo la llamo, nuestro yo nómada.

A casi todo el mundo le gusta viajar.  Por supuesto, existen excepciones…. como los amish de aquella película que no salían ni a tiros al bosque, ni para comprar una mísera aspirina. Pero bueno, centrémonos en las personas normales. Cuando la gente tiene tiempo (vacaciones) y dinero (ahorrado), se lo gasta en viajes. Ejemplo:

 - Pues sí, cari y yo nos vamos al norte, a Asturias. Hemos oído que hay verdes praderas y playas ocultas donde ver el ocaso desde la cueva prohibida en medio del acantilado milenario.

Claro. No te irás Juslibol, ¿verdad que no? A todos nos gusta lo desconocido, donde la sorpresa y el asombro todavía son posibles. Viajar nos estimula, nos hace ver nuestro yo real y nos predispone a vivir y a observar los lugares de otra manera. La pregunta es, ¿cómo de insaciable es vuestro yo nómada?

Por mi parte, os presento al mío. Es el que lo quiere ver todo. Es el que toma el control cuando surge alguna oportunidad de viajar, el que baja la mano cuando la beca ofrecida no supone un reto y la levanta cuando el destino es exótico y desconocido. Es el que escribe las líneas de este blog.


No me malinterpretéis. Me encanta mi país, mi familia y mis amigos. Pero me gustan, en la manera de un lugar al que siempre volver, lo que se podría llamar hogar.  El problema es cuando la rutina y los hábitos comienzan a invadir mi alrededor, alimentando un sentimiento de inquietud que va creciendo poco a poco hasta convertirse en el detonante (o para el caso, un cóctel molotov) que el yo nómada usa, sin dudarlo ni un poquito, para sacudir mi mundo de arriba abajo.

En definitiva, me gusta viajar.  No para ver lugares y hacerles fotos (eso lo puedes hacer con google maps o google earth), sino para sumergirme en ellos. Comenzando por su cultura, pasando por sus costumbres y tradiciones y acabando por sus personas. Y en cuantos más lugares esté, más aprenderé. A fin de cuentas, el mundo es como un libro, y aquellos que no viajan leen sólo la primera página.


sábado, 22 de septiembre de 2012

¡Despegando!

¡Bienvenidos a todos!

Y ahí vamos de nuevo, esta vez China. Así que como es habitual he creado un blog para contar mis aventuras por el Lejano Oriente. Este es un blog para todos los públicos: amigos, familia, trabajo (si lo entienden, claro...) y os animo a todos a seguirme de cerca y a comentar activamente las entradas que vaya escribiendo :D.

En cuanto al nombre del blog, me pasa siempre lo mismo. Intento encontrar alguno que sea bonito, pero a la vez representativo. También fácil de recordar, con gancho y que tenga un ligero toque personal. Demasiadas cosas, y al final acabando volviendo a lo básico: China 101.

El nombre China 101 (leído /China uno cero uno/) es un guiño a la nomenclatura común que se usa en las universidades de habla inglesa, donde la terminación "101" indica un curso simple, un curso de introducción que todo el mundo puede realizar. De este modo, os pretendo ir contando a todos mis primeros pasos en este exótico país, mostrándoos lo que se podría llamar una pequeña "Introducción a China" o "China 101".

Espero que con la ayuda de todos vosotros, este blog se convierta en mi nexo con Occidente en esta nueva etapa de mi vida. Un nexo para estar en contacto con mi gente. 

¡Un abrazo a todos!